Qué tener en cuenta al comprar un soporte para portátiles
09.03.2022
El aumento del trabajo desde casa provocado por la COVID-19 ha suscitado un amplio debate sobre las ventajas relativas de las modalidades de trabajo flexible.
Pero detrás de todas las discusiones sobre si la gente debe o quiere volver a la oficina a tiempo completo, la tendencia de trabajar desde casa ha desencadenado una pandemia secundaria oculta: un gran aumento de las lesiones asociadas a estar sentado frente a una pantalla todo el día sin tener en cuenta la postura, la comodidad y la ergonomía.
No debería sorprendernos. ¿Para cuántos de nosotros la "oficina en casa" ha sido el sofá, la mesa del comedor, la barra del desayuno o incluso nuestra cama? Cuando se emitieron las primeras órdenes de aislamiento en el hogar a principios de 2020, la mayoría de la gente pensó que el trabajo en casa sería un interludio novedoso que duraría como mucho unas semanas. A nadie le preocupaba demasiado el hecho de tener que trabajar en casa durante un periodo de tiempo tan corto.
Pero tras meses de encierro y de órdenes de trabajo en casa, los espacios de trabajo poco adecuados han pasado factura.
Riesgos del trabajo en casa
Según una encuesta realizada por la Asociación Americana de Quiropráctica, el 92% de los quiroprácticos de los EE.UU informaron de un aumento en las remisiones por dolor de cuello, dolor de espalda y otros problemas.
La relación entre el trabajo en casa y un mayor riesgo de lesiones musculoesqueléticas no son nada nuevo. Ya en 2017, uno de los principales especialistas en salud privada del Reino Unido, BUPA, llevó a cabo un estudio en el que se descubrió que la mitad de los trabajadores remotos declaraban tener lesiones, dolores y molestias asociadas a las largas horas que pasan sentados frente a un ordenador portátil, un 10% más que las personas que trabajan a tiempo completo en una oficina tradicional.
Las causas de esta discrepancia no son un misterio. La mitad de los encuestados por BUPA afirmaron que se sentaban "encorvados" sobre su ordenador cuando trabajaban desde casa, mientras que el 40% dijo que trabajaba habitualmente desde el sofá o la cama. No sólo eso, sino que el 47% dijo que trabajaba más horas desde casa.
Los vínculos entre la configuración del lugar de trabajo y los riesgos de dolor de cuello, dolor de espalda, lesiones por esfuerzo repetitivo en las muñecas y las manos, síndrome del túnel carpiano, etc., están bien establecidos.
La legislación en materia de salud y seguridad obliga a los empresarios a garantizar que los escritorios y las sillas estén configurados ergonómicamente para favorecer una buena postura y minimizar la tensión musculoesquelética. No es diferente de las responsabilidades que tienen las empresas para proteger al personal de cualquier otro tipo de lesión relacionada con el trabajo.
Desgraciadamente, cuando se trata de trabajar en casa, eso se pierde con demasiada frecuencia. Los empresarios tienen la obligación de ayudar a los trabajadores a distancia con instalaciones ergonómicas. Pero si no tienes espacio en tu casa para una mesa de oficina adecuada, si por decisión propia tiendes a pasar de la mesa de la cocina al sofá y a la cama y viceversa cuando trabajas desde casa, las opciones estándar para minimizar las lesiones musculoesqueléticas son limitadas.
Soportes para portátiles: Una solución sencilla y flexible
Algo que puede marcar una gran diferencia en cualquier entorno de trabajo en casa es un soporte para portátiles. Sencillos y asequibles, los soportes para portátiles como los de la gama Leitz Ergo Cosy son, sin embargo, muy eficaces para ayudar a evitar las tensiones a las que se somete el cuerpo cuando se está sentado en una posición incómoda durante horas.
La gran ventaja de un soporte para portátiles es que eleva la pantalla a la altura de los ojos, lo que supone una gran diferencia a la hora de aliviar la tensión en la espalda y el cuello. Si te sientas con la cabeza inclinada hacia abajo en cualquier tipo de ángulo para mirar una pantalla, los músculos del cuello tienen que soportar el peso de la cabeza. Con el tiempo, esto se vuelve incómodo, por lo que se encorva para compensar, doblando la parte inferior de la espalda y empujando los hombros hacia adelante, creando tensión en ellos también.
Al colocar la pantalla a la altura de los ojos, no es necesario inclinar el cuello en absoluto. En posición vertical, los músculos del cuello están sometidos a una tensión mínima. Para asegurarte de que siempre puedes tener la pantalla a la altura de los ojos aunque trabajes desde distintos lugares, elije un elevador para portátiles de altura regulable.
También es una buena idea elegir un elevador de portátil que incline el teclado incorporado para que no se pueda utilizar y haya que conectar un teclado externo. Si esto suena como un beneficio extraño, considera esto. Los teclados de los ordenadores portátiles son notoriamente malos para la posición de las muñecas al escribir, y las almohadillas de desplazamiento que sustituyen al ratón son aún peores. Aunque no lo recomendamos como solución permanente, la opción de cambiar el ángulo de escritura durante períodos cortos puede resultar beneficiosa.
Con un teclado y un ratón externos y ergonómicos, además de un reposamuñecas cómodo y ajustable para el teclado y la alfombrilla del ratón, puedes reducir considerablemente el riesgo de desarrollar afecciones como el síndrome del túnel carpiano y las lesiones por estrés postraumático, que pueden hacer que trabajar con un portátil resulte extremadamente incómodo.
Por último, aunque existen en el mercado soportes ajustables para portátiles que prometen un nivel avanzado de control de la altura y la posición, ten en cuenta tu forma preferida de trabajar mientras estás en casa. Si te gusta cambiar de lugar o incluso ir a una cafetería local para hacer un par de horas en un entorno diferente, un elevador de portátil pesado diseñado para dejarlo en tu escritorio limitará tus opciones.
Los soportes para portátiles, como los de la gama Leitz Ergo Cosy,son pequeños, ligeros y fáciles de guardar al final de la jornada laboral, y pueden llevarse fácilmente a cualquier lugar en el que se trabaje, proporcionando la máxima flexibilidad y la tranquilidad de estar trabajando de forma segura en todo momento.